Antes de empezar hablar del
folclore hay que decir hay folclore de toda España pero también hay un folclore
andaluz, toledano… la palabra
tradicional nos dice que es algo que viene de lejos, la palabra popular es una
palabra polisémica.
Una de las
características principales y que debemos de saber es que los textos
folclóricos no tienen autor, pero esto no quiere decir que sean anónimos ni
muchos menos.
A lo largo de la historia y
del paso de los años habido personas que se han encargado de recoger cuentos
que iban de boca en boca, o de escribir cuentos, y a los que hacían esto se les
llama recopiladores, como por ejemplo Cecilia Böhl
de Faber Aparece una que firmaba como Fernando caballero
(seudónimo masculino para poder vender, en esa época las mujeres no tenían
mucha autoridad).
Algo que he aprendido en
este bloque ha sido que los cuentos folclóricos nunca han sido cuentos
infantiles, los hemos considerado así una vez se han realizado las adaptaciones
de los cuentos folclóricos como por ejemplo Disney con Blancanieves y los siete
enanitos o La Cenicienta, cuentos que en clase nos han contado cómo eran antes
de las adaptaciones y la verdad me ha sorprendido mucho, y sin las adaptaciones
se ve claramente que no son para niños.
Estas son algunas de las
características de los textos folclóricos:
- Son textos que no tienen autor, no quiere decir que por ello sean anónimos, no tienen autor (tradición cultural).
- Múltiples versiones
- Origen es desconocido, y no hay versiones originales
- Es literatura popular
- Se transmiten oralmente horizontal y verticalmente
- Los textos folclóricos no son infantiles sino familiares.
- Reflejan las épocas por las que pasaron.
- No son machistas
- Reflejo de la sabiduría popular
- Los textos folclóricos no tienen en general moraleja explicita.
Los cuentos reflejaban las
costumbres típicas de la gente de la época, como por ejemplo en Hansel y Gretel
que es la versión más antigua del siglo XIX de los hermanos Grimm. Todos estos
cuentos están llenos de valores, símbolos, miedos y deseos de las personas.
Ahora hablaré de los tres
géneros distintos de textos folclóricos que existen.
El teatro folclórico: del
pueblo, que no está escrito. El teatro había que memorizarlo para hacer la
representación teatral y para ser folclórico tenía que haber pasado de padres a
hijos, por ello en España no hay tantos. Son interesantes las representaciones
religiosas, pasando los papeles de padres a hijos. Se compraban los papeles y
esos papeles que ya estaban escritos se pasaban a sus hijos para que pudieran
seguir representándose. Muchas de ellas tenían elementos como el cagón del
belén. También hay representaciones folclóricas profanas, como los moros y
cristianos…
Solo tiene una
manifestación, que son los títeres de cachiporra, están dedicadas sobre todo a los niños.
Consisten en que hay un personaje normalmente masculino (casi siempre Pedrito),
sobre un guion improvisaban y ese chico siempre tiene algo que quiere mucho (animal,
flor, chica de la que está enamorado...) y un personaje malo. Pedrito se tira
mucho tiempo persiguiendo al personaje malo, entran y salen y entran a
diferente ritmo (por donde se ha ido, que se ha llevado, pero por donde….).
El final Pedrito encuentra
al malo y le pega con una cachiporra y todos aplauden mucho. Es la única
infantil que se conserva y se tiene desde la baja Edad Media.
Poesía folclórica: Hay
muchas para adultos y hay muchas para niños (nanas, oraciones infantiles,
canciones del corro, pasillo, rifar, comba…) menos todo lo de la misa que no es
folclore; sin embargo los villancicos o cuatro esquinitas tiene mi ama... Eso sí. Eran una retahíla, texto que
se repite acompañado de una estructura (una dola, tela catola…). Canciones
folclóricas de toda la vida, porque cuando se le quita la representación lo que
queda es poesía.
Las canciones como las de la
comba en verdad no son nada educativas, tienen trasfondos.
La prosa folclórica son
cuentos relatos breves que se transmitían. Vladimir Propp era un antropólogo
libro “morfología del cuento”. Además se encargó de clasificar los cuentos en
cuatro grupos:
- Los mitos, incluye todos los textos que tienen como protagonistas a dioses y a héroes de la antigüedad. Historias que en su origen tenían una función religiosa. Dentro de los mitos están las leyendas hagiográficas (relacionadas con santos, personajes de la religión). Los apólogos son como las fábulas pero que no son animales. La diferencia que marca entre un cuento y una leyenda es que las leyendas son en lugares concretos, sitios concretos y nombres concretos.
- Cuentos de animales, y hace a su vez una subclasificación, por un lado las fabulas en los que los animales representan vicios y virtudes, y no a las personas. Las zorras siempre son astutas, los carneros son cabezotas. Característica del las fabulas ellas vienen con la moraleja añadida. Otro grupo es lo que podemos llamar cuentos de animales, que son aquellas historias en las que todos los protagonistas son animales y estos animales representan a personas, pero no vicios y virtudes solo a personas (los roles).
- Cuentos de hadas aparece algún personaje de carácter mágico, para que sea de hadas tiene que existir magia de por medio.
- Cuentos de Fórmula, incluye una serie de cuentos, que o bien parte del cuento o el cuento entero tienen que aprendérselo de memoria o recordar para poder contarlo. (Ej.: La ratita presumida).
Dos
clasificaciones realmente interesantes relacionadas con el mundo de la
infancia, cuentos folclóricos no son infantiles.
Adaptadores y Recopiladores
También se hicieron
otras clasificaciones como las de Sara C. Bryant y Gianni Rodari. Sara C.
Bryant fue la primera mujer cuentacuentos y la primera que escribió el primer
libro de técnicas de cuentacuentos. Su clasificación está orientada a la edad,
ya que ella contaba cuentos a los niños en función de sus edades.
Rodari que fue un
pedagogo y maestro italiano. En cambio hizo otra clasificación que fue en tres
bloques: Animales, mágicos y bromas y anécdotas. Clasificación de textos
folclóricos en prosa y técnicas para cambiar cuentos (los personajes buenos se
convierten en malos, y al revés).
El folclore literario esta
desde tiempo inmemoriales representaciones icónicas en las que se muestra a
gente escuchando historias. Los romances son semifolclóricos porque se cree que
los autores si eran personas cultas, pero la gente los oían y los traspasaba.
En el siglo XVI, aparecen los romances.
Encontramos una historia que
se cree que es un MITO latino; la historia de Cupido y sique, que la recogió
Apuleyo (el asno de oro). Se puso de moda en la época de Perrault, después otro
escritor escribió el Lobo blanco. La traducción de ahora es La Bella y la
Bestia.
En el siglo XIX, en
Alemania, surge el Romanticismo y una característica importante que es el
nacionalismo, el egocentrismo hace que nos miremos solo a nuestro propio
ombligo. Empieza a interesar lo que nos hace a nosotros mismos; una de las
cosas que nos lo hace son nuestras tradiciones. El folclore; los hermanos Grimm
eran dos filólogos muy serios, elaboraban el diccionario de la academia
alemana. Les ofrecieron que si querían hacer una recopilación de cuentos para
que se conservaran. Su intención no es moral como Perrault sino
conservacionista, ser fieles a como se contaban los cuentos para que no se
perdieran, eso sí típicos alemanes.
Publicaron su primer libro
de cuentos y se agota en poco tiempo. Así que la editorial prepara una segunda
edición en la que incluyen más cuentos. También se vende entera pero empiezan
a llegar quejas a la editorial porque
estaban llenos de cosas horribles como la violación, agresión,
desmembramientos… claro al no ser infantiles y leerlo niños ocasiono jaleo.
Pidieron que quitaran las
cosas tan grotescas antes de la 3 edición, pero hoy en día quitaríamos más
cosas. En esa tercera edición se
suavizaron aspectos de las anteriores.
Autores:
Charles Perrault
Se interesó mucho por
el folclore celta. Recogió y adaptó cuentos con una intención moralizante (lo
que convierte su obra en paraliteratura) dirigida a la corte y no a los niños;
además, su intención moralizante hace que no tenga una gran riqueza estética.
Perrault tenía un planteamiento humanista y concebía el exceso (de cualquier
tipo) como algo negativo. Todo el mundo llamaba a sus cuentos “Los cuentos de
mamá oca” por la ilustración que figuraba en la cubierta de la edición original
de su obra.
También hay otros
autores como: Jeanne-Marie Leprince de Beaumont à Recopiladora de
relatos y autora de la versión más difundida de “La Bella y la Bestia”.
Jacob Grimm y Wilhelm
Grimm (Los hermanos Grimm)
Nacen en Alemania a
finales del Siglo XVIII, pero su obra se desarrolla durante el XIX. Se dejaron
influir por el nacionalismo típico del romanticismo en el que se hacía una
reivindicación de lo propio. (Viven en una época de revoluciones y
nacionalismos). Todos los cuentos de los hermanos Grimm responden al esquema de
Propp en el que se observa una transición a la edad adulta del protagonista a
través de pruebas. Los hermanos Grimm tuvieron una intención conservacionista
al recopilar los relatos; pues deseaban conservar esa riqueza popular “alemana”
(ellos creían que era alemana) tratando de recopilar, de la manera más fiel
posible, los cuentos que les habían contado.
Recopilan numerosas
historias en la obra “Cuentos para la infancia y el hogar”.
Este espíritu
conservacionista que les hacía querer mantener el relato tal cual era, hizo que
los relatos estuviesen llenos de sexo, violencia, muerte… No siendo cuentos
destinados a niños a pesar del nombre de su obra. Tras el éxito de la primera
edición de esta obra nombrada anteriormente y debido a las protestas de
numerosos padres por el contenido del libro, el editor pidió a los hermanos
Grimm que modificasen aquellos aspectos de los relatos que no eran apropiados
para los niños, algo a lo que se negaron en un principio pero que,
posteriormente, aceptaron y realizaron pequeñas adaptaciones
Siglo XIX
Charles Dickens en Inglaterra que
cuenta historias de niños de la calle.
Padre Coloma: Tiene
cuentos propios y cuentos que adapta muchísimo con intención moralizante;
destaca por adaptar cuentos paganos llevándolos al ámbito religioso, por
ejemplo:
(Personaje malo: Demonio Conocido
como “Pedro Botero”.)
(Personaje que ayuda Ángel
de la guarda.)
Hans Christian Andersen
(Copenhage) “la sirenita” fue un personaje reconocido, querido, apreciado y que
además pudo vivir de su pluma, de escribir. Vivió de sus cuentos breves. Los
premios Hans Christian Andersen. Persona muy depresiva y sus cuentos reflejan
su depresión, lo que hacía era recoger los textos de la tradición, pero cuando
se pone a escribir su cuento cambia todo lo que quiere sin ningún criterio el
único que tiene es adaptarlo como él quiere. Uno de los cuentos más tristes es
“la pequeña vendedora de fósforos o la cerillera”. La sirenita es folclore.
Calleja y el padre Coloma (son nuestros Hans Christian Andersen) Coloma público
libros infantiles, introduce dentro de sus cuentos personajes como la virgen
María, el ángel de la guarda, cambia a los personajes paganos por personajes
católicos. Introduce al demonio, en vez de aparecer lobos aparecen demonios
pero para no llamarlo así emplea el término las calderas de Pedro botero (el
infierno) y Pedro botero (el demonio).
Lo que más me ha llamado la atención
de este bloque, ha sido que me ha hecho recordar los cuentos que me contaban de
pequeña, y al escuchar en clase realmente como eran los cuentos sin las
adaptaciones me ha sorprendido mucho, ya que siempre he estado convencida de
que los cuentos eran siempre como me los habían contado.
Hoy en día se puede decir
que las canciones folclóricas se han perdido bastante, ya que cuando yo era
pequeña se cantaban unas canciones saltando a la comba, que durante mi estancia
en prácticas no he visto ninguna, y es algo que se va a ir perdiendo poco a
poco, y es una pena. Como futura maestra también he aprendido que debemos de
ser capaces de elegir un cuento y ser capaces de adaptarlo para los niños pero
siempre siendo fiel al original. Para finalizar debemos de tener muy claro que
cuando adaptamos un cuento, pensar al público que va dirigido, y también como
futura maestra daré mucha importancia en el aula a los cuentos folclóricos y a
las canciones para evitar que se pierdan del todo.
Perfecto.
ResponderEliminar